Lo que se dijo en los medios
Fue sobre todo patente en Cataluña, donde múltiples medios de comunicación anunciaban a bombo y platillo la oleada de niños que vinieron al mundo 9 meses después de aquel mítico gol. En concreto, la Ràdio de Catalunya anuncia un 45% de aumento de la natalidad.
Y no es la primera vez que nos hablan de algo similar, está sobradamente demostrado el “efecto Navidad”, que supone el nacimiento de muchos más niños en septiembre, debido a las imperiosas ganas de sus progenitores de mantener cálido su hogar.
El “Efecto Iniesta”
En este contexto, nace un artículo encabezado por Jesús Montesinos, jefe de investigación e innovación en Manresa, acompañado por otros investigadores barceloneses, que intenta refutar esta información, lo cual deja patente la velocidad con la que muchos medios ofrecen información sanitaria a los ciudadanos sin contrastarla mediante los estudios oportunos.
Quisieron emplear una población que se considerara a priori bastante entusiasta del club, y qué mejor que la zona donde nace su entrenador de aquel momento, Pep Guardiola. Se eligen por tanto los condados de Solsones y Bages.
¿Qué pasó en realidad?
Después de múltiples tratamientos estadísticos de los datos, se estableció que efectivamente, en febrero de 2010 aumentó un 16% la natalidad de la zona, pero muy lejos del 45% anunciado por la radio catalana.
Los autores concluyen diciendo: “We may infer that heightened euphoria following a victory can cultivate hedonic sensations that result in intimate celebrations, of which unplanned births may be a consequence” (“Podemos deducir que la euphoria adolescente consecuente a la Victoria puede cautivar sensaciones hedónicas que concluyan en celebraciones íntimas, teniendo como consecuencia nacimientos inesperados”).
Por último, también tienen en cuenta a los investigadores “disidentes”, los cuales casualmente no son aficionados del equipo catalán. Éstos, usando una metodología similar, no fueron capaces de replicar los datos en una población como la de Barcelona. Y argumentan finalmente: “para cerrar la brecha entre los datos de observación y juicio, sería de gran ayuda que Iniesta estuviera dispuesto a repetir su intervención, aunque el costo de un estudio de este tipo podría ser prohibitivo, por no hablar de perjudicial para el grupo de referencia (Chelsea).”