27 septiembre 2023 | Publicado : 09:18 (28/09/2023) | Actualizado: 09:19 (28/09/2023)
Una compañía, que pretenda mantenerse competitiva en los mercados globales con éxito, deberá aplicar estrategias con las que desarrollar una cultura para la productividad empresarial que le permita destacar sobre las compañías que actúen en el mismo sector. En este artículo se ofrecen algunos consejos para alcanzar este objetivo.
Los equipos de trabajo más productivos son aquellos que consiguen reducir el tiempo que se le dedica a las tareas secundarias para poder centrarse en las más importantes, sin tener que trabajar de más. Aunque el aumento de la productividad sin incrementar la cantidad de trabajo para algunos puede resultarle una utopía, la realidad es que hay una serie de estrategias con las que se consigue de forma óptima y sencilla.
En pocas palabras, el concepto de productividad laboral en el entorno empresarial hace referencia a las acciones que acomete una empresa, invirtiendo recursos para sacar el máximo provecho de ellos. Es un indicador clave del estado de salud de una compañía y demuestra la calidad en su gestión administrativa.
El objetivo siempre será alcanzar el máximo rendimiento. Para conseguirlo habrá que analizar todos los agentes involucrados en el trabajo de la compañía que contribuyen a alcanzar el punto máximo posible de eficiencia y calidad.
A continuación, se ofrecen una serie de tips para que las empresas se vuelvan más productivas.
El trabajo por objetivos aumenta la implicación del equipo con la finalidad del proyecto, haciéndoles partícipes del crecimiento y el desarrollo de la empresa, algo que se refleja enseguida en la productividad.
En este sentido, es muy recomendable para conseguir empleados más involucrados trabajar para alcanzar determinados promedios, como puede ser llegar a un número de clientes en un tiempo preestablecido. Es importante generar objetivos claros y razonables para no generar frustración o desmotivación al saber que se le está exigiendo algo inalcanzable.
Es una de las grandes ventajas que ofrece el teletrabajo, que permite la flexibilización de la jornada y el ahorro de tiempo y gastos derivados de los traslados y desplazamientos. De este modo, es mucho más fácil poder encontrar el equilibrio ente la vida laboral, personal y familiar, incidiendo en la retención de talento.
La tecnología en el siglo XXI es la mejor aliada para alcanzar una productividad sólida en las empresas, aliviando la carga de la vida profesional a través de la modernización. Es muy útil utilizar todas las herramientas que permiten automatizar los trabajos y evitar que el equipo humano dedique su tiempo a tareas manuales, mecánicas y monótonas.
Preocupaciones, malestares, incertidumbre, angustias… son reacciones habituales frente a los cambios que se están dando en estos tiempos difíciles, por lo que la moral de la plantilla puede verse bastante afectada.
Para contrarrestar estos sentimientos, es importante hacer hincapié en la calidad de las reuniones que se tengan con los empleados a nivel humano, en lugar de a la cantidad. Estas charlas deben dar espacio para que los trabajadores expresen sus inquietudes y sientan que la compañía en la que trabajan les escucha, comprende y acompaña.
Algunas sugerencias de cuestiones que se pueden plantear en este tipo de reuniones son las siguientes: ¿Cómo estás organizando tu día?, ¿Cómo te sientes con la situación actual?, ¿Podemos hacer algo para que te sientas más cómodo y motivado? ¿Qué crees que podrías hacer mejor o de forma diferente?
Relacionado directamente con el punto anterior, no hay nada más improductivo que un trabajador desmotivado, por eso la necesidad de mantener una comunicación de calidad humano con ellos para que se sientan mejor a nivel emocional con la compañía.
Pocas estrategias son tan eficaces para una empresa como aquellas que trabajan con el objetivo de contar con empleados felices y satisfechos, una vía directa para el aumento de la productividad y la fidelidad de la compañía. La motivación empresarial es indispensable para que los empleados mantengan una actitud positiva. Es necesario hacerles partícipes y que sientan que sus tareas y el trabajo que desempeñan son claves para el funcionamiento de la organización, necesarios para alcanzar los objetivos de rentabilidad con los que mantenerse en el mercado, expandirse y crecer.
Para conservar una motivación alta es necesario trabajar el salario emocional de los empleados. Entre los aspectos más destacados, en este sentido, se encuentran ofrecer opciones de desarrollo profesional, el reconocimiento de sus logros, la conciliación de la vida familiar, personal y profesional, una correcta gestión de la comunicación interna, contar con un clima laboral agradable… En decir, todas las acciones que aumenten el bienestar de las personas que conforman una organización.
